Lux Aeterna o cómo vender gato por liebre

Una de las canciones de bandas sonoras que más me gustan es Lux Aeterna, quizá más conocida como "la canción de la película Requiem por un Sueño". Casi se podría decir que es un vivo ejemplo de que la música clásica moderna, por muy extraño que suene, sigue entre nosotros. Pero hay gente que se aprovecha de la genialidad de esa pieza para engrandecer su producto, y no me gusta nada.

Aunque Clint Mansell sea el compositor, se ha utilizado esto en numerosos anuncios de televisión, tráilers de películas o incluso canciones de grupos ajenos al compositor. Y vale, sí, supongo que hayan pagado derechos de autor por usarla, pero... no es lo mismo. Eso sí, yo soy el primero en quedarme con la versión coral y reorquestada que hicieron para el tráiler de El Señor de los Anillos: Las dos Torres, y a la que llamaron Requiem for a Tower. Es más potente que el original, de esos que pondrías a todo volumen en tu habitación. Escuchad, escuchad:

Ya os empieza a sonar la cancioncita, ¿eh? A mí gusto, es buenísima. Pero lo que ha hecho otra gente con ella me parece desastroso. Forma parte de la malísima película Sunshine (en la que el Sol se estaba muriendo y había que reactivarlo, sí), en Zathura (la 'sucesora' de Jumanji), en el tostón El Código Da Vinci... ¡Incluso para el tráiler de la película de mi héroe Jack Bauer de la serie 24! Y además, le defenestran al usarla en el reality Factor-X versión británica.

Series como Terminator o Smallville también hicieron uso de ella para tráilers o vídeos promocionales. Y aquí en España más de una vez la he visto usada con total impunidad para anunciar algún partido de fútbol mediocre. Es que es lo que tiene esta canción, que se la pones a cualquier cosa y parece que va a ser la repanocha. Esta melodía hace épico un vídeo, aunque sea del tonto de Mr Bean va a parecer la película más emocionante de la historia.

Y como habéis podido ver, me indigno. Esta pieza debería quedarse donde está, en la Banda Sonora de Requiem por un Sueño y versionada en Las dos Torres. Pero ahí quieta, sin dar falsas esperanzas a los que pretenden encontrar en Sunshine un peliculón. Eso sí, a Jack Bauer se lo perdono, aunque yo no esté del todo de acuerdo en su uso indiscriminado para justificar pegar tiros.